El devastador avance del fuego destrozó un edificio, 47 viviendas y el depósito de un mayorista. Las personas que abandonaron sus departamentos se reconocían unas a otras por las manchas de hollín y el olor al humo impregnado en todo.

El devastador avance del fuego destrozó un edificio, 47 viviendas y el depósito de un mayorista. Las personas que abandonaron sus departamentos se reconocían unas a otras por las manchas de hollín y el olor al humo impregnado en todo.